Toxina Botulínica - Arrugas
La toxina botulínica, conocida habitualmente como bótox, es una neurotoxina elaborada por una bacteria denominada Clostridium botulinum que actúa sobre las células musculares bloqueado su actividad ayudando a la reducción de las líneas de expresión en el tercio superior de la cara, a la disminución de migrañas crónicas, bruxismo crónico y corrección de secuelas de parálisis faciales, entre otros. Es por esto, que su uso es tanto estético como médico.
Botox es el nombre comercial que se le da a esta toxina. Cuando se habla de toxina botulínica no siempre de habla de Botox, ya que existen muchas marcas alternativas en el mercado (siendo esta la original).
Aplicamos Botox para disminuir las arrugas dinámicas (arrugas que aparecen por la repetición de movimientos faciales) mediante la inyección de una cantidad dependiente de la cantidad de fuera muscular y arrugas presentes para lograr una eficiente inhibición en la contracción muscular. Es importante que este procedimiento sea realizado por un especialista ya que inyectar cantidades mayores podría tener un efecto no deseado.
Datos del procedimiento:
- Resultados: a los 15 días
- Tiempo de aplicación 20 a 30 minutos.
- Evaluación inicial: Si.
- Control post tratamiento: a los 15 días
- Duración: de 3 a 4 meses.
- Anestesia: no es necesaria.
5 Beneficios:
- Devuelve un aspecto jovial al rostro.
- Previene la aparición de arrugas.
- No deja marcas
- No cambia el aspecto del rostro ni da volumen.
- Es reversible